04 marzo 2022
Updated 25 enero 2023
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El RegTech es una de las áreas más importantes y demandadas en la actualidad por las empresas líderes que están apostando por resolver sus retos regulatorios y en materia de compliance normativo apoyándose en tecnologías innovadoras.
Este concepto, de reciente creación pero con ya una consolidada presencia en la mayoría de sectores de actividad, está actualmente siendo la apuesta estratégica y estrella de aquellas compañías que desean impulsar su productividad contando con herramientas error-less que gestionen de forma autónoma los controles anti-fraude que deben implementarse en la mayoría de procesos.
En este artículo, desarrollaremos un análisis en profundidad del RegTech en 2022, y qué nos depara para el próximo 2023, pasando por las compañías que han obtenido sellos oficiales que certifican la calidad de sus soluciones en el sector y desgranando los tipos de plataformas RegTech disponibles y sus características.
La definición más completa del término expresa que el RegTech es el conjunto de tecnologías, compañías y profesionales dedicados a desarrollar soluciones digitales enfocadas en el cumplimiento de los estándares técnicos exigidos por las leyes que afectan a las compañías de cualquier sector.
Del inglés regulatory technology o regulation technologies, el RegTech pertenece a las llamadas X-Tech, una nueva forma de entender los modelos de negocio basada la utilización de plataformas digitales desarrolladas por proveedores especialistas en cada área y que cuenta con gran apoyo de las grandes y tradicionales empresas. El término fue acuñado por primera vez por la FCA (Financial Conduct Authority) para referirse a la automatización de los controles AML (Anti-Money Laundering) llevado a cabo por las compañías del sector financiero. Posteriormente, se extendería a todas las áreas de actividad.
Tecnologías como el machine learning, el desarrollo en base cloud, el big data, la inteligencia artificial y el blockchain potencian las soluciones y herramientas RegTech para que estas alcancen los mayores índices de calidad y autonomía posibles.
La gestión del riesgo y la prevención del fraude son dos de los aspectos en los que este área pone foco. Las compañías deben poder operar bajo un paraguas de seguridad y garantías, algo fundamental para desarrollar su actividad sin miedo a dos de sus preocupaciones más relevantes: las posibles sanciones y el respaldo regulatorio.
Toda operación llevada a cabo en una compañía, ya sea por ella misma o cuando los usuarios hacen uso de sus productos o servicios, es responsabilidad última de esta. Derivar esta responsabilidad a un tercero de confianza que gestiona el proceso es la respuesta para evitar las sanciones derivadas de posibles intentos de fraude cometidos por clientes, proveedores u otros actores.
En cualquier caso, el objetivo de las soluciones RegTech es el de evitar el fraude en primera instancia. Es decir, ya no sólo asumen la responsabilidad si no que convierten los procesos en infranqueables e impracticables para todos aquellos que deseen incurrir en actividades ilegítimas. Es por eso que asumen la responsabilidad, porque conocen sus herramientas y saben que la fuerza disuasoria de ellas combinada con sus férreos controles es capaz de doblegar el fraude por completo.
La eficiencia y la agilidad guían al RegTech, siendo este una respuesta a las necesidades de las empresas ya no sólo en cumplimiento normativo como tal, si no también en su transformación de procesos de cara a la reducción de costes y el aumento de la productividad.
Las mejores soluciones RegTech se integran de forma ágil y sencilla en los procesos de las compañías para transformarlos por completo sin complicaciones. Los proveedores RegTech deben ser expertos en tres áreas fundamentales: operativa de procesos, legislación y materia regulatoria en cualquier sector y región y transformación digital.
Esta es la propuesta que las empresas RegTech hacen a sus clientes; y es que les asesoran tanto en materia normativa como en transformación, pero con el beneficio añadido de contar ya con soluciones previamente desarrolladas y que se integran fácilmente en sus clientes. Son especialistas y expertos.
Seguro que en muchas ocasiones has encontrado el término RegTech junto al de FinTech. Esto se da debido a dos factores: las compañías del sector financiero y relacionados fueron las primeras en transformarse digitalmente y, al mismo tiempo, este sector es uno de los que más regulaciones tiene.
El FinTech agrupa a todas las compañías relacionadas con las finanzas y de las siguientes áreas que han hecho uso de la tecnología para desarrollar su negocio: sector financiero en general, banca, seguros, inversiones y similares. Todas estas compañías se enfrentan al cumplimiento de leyes muy estrictas, y de no hacerlo, a graves sanciones. Es por eso que el RegTech ha resultado ser la respuesta a sus mayores y más delicados desafíos.
El muy conocido en estas industrias proceso KYC (Know Your Customer), se transformó en el actual eKYC (electronic Know Your Customer) por parte de las empresas RegTech, consiguiendo que éstas lograran desarrollar customer journeys de éxito y operar en cualquier mercado y legislación con total seguridad y garantías.
Los cambios normativos en estos sectores requieren de una respuesta rápida. Las RegTech están diseñadas para adaptar sus tecnologías de forma dinámica a las nuevas leyes y de forma instantánea, por lo que el cumplimiento estaría asegurado por un tercero que ya “habría hecho los deberes”, evitando la necesidad de impactar a departamentos legales y de tecnología (IT) de los clientes de estos proveedores.
Pese a que estas compañías son las principales fuentes de ingreso para las RegTech y sus clientes más exigentes y relevantes, cualquier empresa en cualquier sector puede hacer uso de las tecnologías y herramientas desarrolladas por proveedores de tecnología regulatoria para cumplir, por ejemplo, con las normas en materia de protección de datos personales o dar respaldo legal, agilidad y ahorro en costes a sus procesos de incorporación de clientes o de contratación de productos y servicios.
A continuación, destacamos algunos de los muchos casos de uso que el RegTech está resolviendo para empresas de todos los sectores:
El RegTech ha supuesto una serie de cambios muy significativos en los modelos de negocio de las empresas que han abrazado sus tecnologías y las han implementado en sus procesos y operaciones. Más allá del objetivo de cumplir con las regulaciones más exigentes con total transparencia y facilidad, este área ha venido a empujar a compañías poco digitales hacia modelos ágiles y que ahora sacan provecho de la tecnología más disruptiva, dándoles el empujón necesario para ser digitales.
Una de las principales ventajas se basa en dos pilares fundamentales: eficacia y eficiencia. Los procesos burocráticos y tareas mecánicas han desaparecido y son realizados de forma prácticamente instantánea por softwares automatizados que no fallan. El error no es una opción en las soluciones RegTech modernas, y es tan así que estas han demostrado ser capaces de identificar un posible intento de fraude con más eficacia que un agente humano por la serie de factores que tienen en cuenta, en la mayoría de ocasiones imperceptibles para nuestros ojos.
Cumplir con las normativas y adaptar los procesos a sus estándares revierte en la reducción de tiempos. Muchas empresas, por miedo a sufrir ataques delictivos, establecen controles que podríamos decir que llegan hasta límites exagerados. Esto rompe totalmente la experiencia de sus clientes al interactuar con ellas y aumenta las tasas de abandono en procesos tan cruciales como la contratación o el onboarding de cliente.
Los nuevos marcos regulatorios, conscientes del momento actual y las tendencias en la economía, se han adaptado para fijar procedimientos 100% seguros y que, si se siguen como ellas proponen, permiten a las empresas cerrar operaciones en tiempos record. Aquellas que antes se demoraban días o semanas por la burocracia exigida ahora pueden finalizarse en minutos gracias al cumplimiento normativo de máximo nivel y automatizado.
Del mismo modo, cumplir con la regulación significa poder operar en cualquier mercado, incluso adquiriendo clientes de forma remota y sin presencia física. Y es que, muchas compañías alegan motivos legales y trabas burocráticas cuando se les pregunta por qué no llegaron a introducirse en determinados mercados.
Los gastos en costes materiales (papel, capacidad de almacenamiento…) han supuesto un gran desembolso para las compañías. Sin embargo, las nuevas soluciones RegTech vienen a convertir en paperless procesos que llevaban mucho tiempo a los empleados y que generaban fricción en los clientes, siendo ahora gestionados en terminales digitales en segundos.
Este impulso a la transparencia y la seguridad está también mejorando la percepción que tienen los demás de las compañías. Contar con un partner RegTech que facilite y garantice tu actividad impulsa la reputación del negocio y de sus marcas en el mercado y la sociedad.
Las mejores RegTech están ofreciendo servicios en formato SaaS (pago por uso)y con base cloud (solución que corre en los sistemas del proveedor). Lo principal a tener en cuenta en este sentido es que la tecnología que va a transformar tus procesos para cumplir con las regulaciones más exigentes se integre fácilmente en ellos.
Las mejores soluciones no requieren de infraestructura ni de inversiones, se desarrollan a lo largo del customer journey sin dificultad, sin impactar a los departamentos de IT si es que los hay y son sencillas tanto para empleados como para clientes.
Otra cuestión crucial es la actualización de estas soluciones. En este caso, que aseguren que si hay una nueva normativa la plataforma se adaptará a ella y el proceso seguirá siendo compliant incluso después de los cambios normativos, sin impactar al negocio.
Las herramientas más importantes en lo que se refiere al cumplimiento de la regulación son: la verificación de identidad basada en KYC y AML correctamente integrada dentro de los procesos de digital onboarding, la firma electrónica con respaldo eIDAS para los procesos de contratación, las soluciones de comunicación certificada (burofax electrónico), las herramientas de autenticación con base en estrategias de múltiples factores que hagan uso de la biometría, los controles antifraude con verificación, almacenamiento y tratamiento de documentación de identidad para la prevención, el análisis y la gestión de riesgos, así como soluciones generales de automatización (RPA) para digitalizar cualquier procedimiento de compliance.
El RegTech da respuesta de distintas formas a todas y cada una de las regulaciones que afecten a una compañía, sin excepción. Los proveedores son capaces de adaptar su tecnología para que esta se ajuste a las demandas de la legislación, y de ir actualizándose a medida que este marco cambia.
Sin embargo, hay ciertas normas que están estrechamente relacionadas con la actividad del RegTech dada su concepción por las autoridades e instituciones. Son aquellas relacionadas con los controles AML como la directiva europea AML6 (Sexta Directiva de Blanqueo de Capitales). Esta norma permite a compañías del sector financiero y relacionados ofrecer sus productos y servicios en toda Europa sin precisar oficinas comerciales.
Del mismo modo eIDAS (electronic IDentification, Authentication and trust Services) define el ejercicio y uso de la firma electrónica, algo que regula cómo deben producirse los procesos de contratación y de aceptación.
El RegTech ha aportado muchísimo en lo que respecta al cumplimiento de las leyes de protección de datos, destacando entre todas ellas el RGPD. Esto aplica para todas las áreas de la compañía, incluyendo clientes, proveedores y empleados. La aportación en este sentido ha sido diferencial y ha impactado de lleno. En lo que respecta a los pagos, PSD2 y SCA son las normativas más destacadas y a las que el compliance digitalizado ha dado respuesta.
El RegTech en 2022 está siendo marcado por la adopción de tecnologías innovadoras basadas, por ejemplo, en el reconocimiento facial biométrico y el NFC. El sector en sí tiene no mucho que recorrer este año pues ya está muy consolidado pero hay ciertas compañías que cuentan con una tecnología con gran fiabilidad y tasas de éxito frente a otros proveedores que no pueden asegurar que los procesos se realicen a la primera, sin generar frustración en el usuario.
Esto está muy pulido por algunos proveedores de tecnología regulatoria mientras que otros aún tienen camino por recorrer este año en ese aspecto.
Para 2023 podemos esperar una adopción de las tecnologías compliance más amplia por parte no sólo de las compañías del sector financiero y relacionados. En los próximos años veremos cómo la confianza en estas tecnologías por parte de empresas de sectores que a priori podría parecer que no tienen tanta cabida en el RegTech aumenta considerablemente, ya que su implementación en ellas ya es toda una realidad consolidada aunque pueda extenderse mucho más.
A la hora de elegir un proveedor RegTech para 2023 o el actual 2022, hay que tener en cuenta todos los factores que hemos desgranado a lo largo del artículo. Sin embargo, tener en consideración qué organismos están apoyando la actividad de ese proveedor es crucial para contrastar su calidad y fiabilidad.
El sello RegTech100, otorgado por FinTech Global es una de las pocas certificaciones que reconocen la excelencia en la prestación de este tipo de servicios a nivel global. Las compañías que han contado con este sello son confiables y ofrecen soluciones de calidad.
Que la compañía asegure el respaldo con estándares ISO es otro de los aspectos a tener en cuenta, ya que esto confirma que la empresa ha pasado por una serie de auditorías que certifican la fiabilidad de su tecnología y soluciones.
FIDO Alliance, por su parte, es un conglomerado de compañías comprometidas con determinados estándares de cara a productos y servicios ofertados por las compañías RegTech. La pertenencia a esta alianza es un ejemplo de compromiso con la calidad. Confirmar si la compañía forma parte de las asociaciones profesionales del sector al que pertenece es otro indicador de confianza.
Es por tanto la combinación de todos estos factores la que nos dará una visión rápida y global del respaldo que puede llegar a ofrecer un partner confiable para transformar digitalmente nuestro negocio al mismo tiempo que cumplimos con las regulaciones y estándares técnicos más exigentes.